sábado, 23 de mayo de 2009



Si hace dos semanas escribí que tuve un click en la cabeza que dije: "buena Mariana bastá, largá la comida", en realidad lo tuve hace dos días. Tengo hemorroides, en realidad las padezco desde hace diez años, pero creo que con el incremento de peso y el estrés que sufro a causa del desempleo y otros inconvenientes domésticos eso ha hecho que mis hemorroides internas hayan prolapsado, en una palabra estallado. Ayer y antes de ayer no podía ir al baño, estaba súper duras las heces y casi me muero desagranda cuando fui al baño... fue algo horrible. Ahí me dije a mí misma o paro acá o si sigo engordando así todo mi cuerpo va empezar a padecer de enfermedades. Estoy PESANDO 95 KILOS, un horror. Ayer comencé a comer sano y hoy pude ir bien al baño, me duele todavía al evacuar pero al menos voy al bañor y saco literalmente la mierda que tengo adentro que es lo importante. Realmente, muchas veces niego la existencia de que la obesidad me jode, y jode todas las etapas de mi vida, pero realmente invade cada una de mis etapas. Me hace sentir insegura cuando voy a una entrevista, no tengo ropa para ponerme, a pesar de que me compre pantalones, nunca son suficientes, porque los termino rompiendo al poco tiempo, todos los corpiños me quedan chicos, realmente es asqueroso. Pero más allá de la apariencia me da mucho miedo por mi salud. Tengo tendencia a la hipertensión, y entre el estrés que estoy sufriendo por la búsqueda del trabajo y el manoseo continuo que estoy sufriendo, sumado a la comida basura que estaba comiendo (pizza, pizza y más pizza) es un combo letal para llegar a los 130 kilos y morir de un ataque al corazón (con suerte) o tener un acv. Me doy cuenta también que soy demasiado emocional, que como de acuerdo a mis estados de animo, voya postear sobre el hambre emocional y también he decidido postear fotos mías para horrorizarme y para que me sirvan como indicador gráfico para ver mi progreso. Ultimamente estoy entrando a muchas páginas de chicas que adelgazan o quieren adelgazar y algo que me decepciona un poco es ver las pocas fotos que postean de ellas. Es lindo poner a "thinspiration", o chicas célebres que te inspiren, pero a mí personalmente me inspira más ver una persona de carne y hueso, ver su antes y después. Bueno ahí voy a poner una foto mía (que me la tomo una amiga y cuando me la paso me horroricé) y una foto de la hermosa Mónica Bellucci para que me sirva de inspiración.






sábado, 9 de mayo de 2009

Retomando fuerzas

Es mejor tomarse la dieta "pasito a pasito" y pensar que cada escalón, cada kilo que bajamos, cada cm que perdemos, es mejor que nada, es importante ver el proceso y no el resultado.


Había llegado casi a pesar casi 97 kilos de nuevo, ahora bajé a 94, es impresionante como cuando dejo de comer como un cerdo bajo de peso, igual sigo siendo un cerdo, jajajaj. La cuestión es que al ser comedora emocional: me mando morfi cuando estoy sobre todo pero debo decir que muchas veces como cuando estoy alegre también, pero creo que como más cuando suelo estar deprimida. El tema es que estoy sin trabajo, y al estar sin trabajo, y como vivo en Argentina, conseguir un buen laburo cuesta un perú...y me pone muy nerviosa. El otro día por ejemplo fui a una entrevista de trabajo y me pidieron l¡¡¡¡las medidas!!! Sé que era para algo tipo promoción (pero sin llegar a serlo) la verdad me puse muy mal, salí llorando de la entrevista. No tanto porque me importara el trabajo, porque en sí era una mierda y pagaban mal, sino porque pienso que cuando vas a una entrevista muchas veces nos juzgan (creo que la gran mayoría de las veces) por nuestra apariencia y no por nuestra verdadera capacidad. Fue como mi breaking point, mi punto cúlmine, me dije a mí misma "bue, Mariana ponéte las pilas y adelgaza porque así no vas a conseguir nunca laburo". El tema de cuando estoy haciendo dieta o me estoy cuidando es que quiero ver resultados ya y cuando por ahí me mato haciendo gimnasia o cuidandome y no veo resultados tan rápido como espero me quiero matar y largo todo a la mierda. Esta vez me estoy tomando todo con más calma, muchas veces tomarse las cosas no tan obsesivamente hace que nuestro cuerpo se relaje y haga su trabajo. Si bien hacer dieta es un esfuerzo físico y mental, creo que la obsesión es mala... La semana que viene pienso retomar gimnasia, apuntarme en algún gimnasio de barrio, y sobre todo empezar a caminar que es lo que tengo que hacer...