martes, 1 de febrero de 2011

Frustación con mi carrera

Siempre me pongo a indagar el porqué de mi gordura.Mi condición va más allá de lo obvio: que estoy gorda porque como mucho... me refiero a las causas psicológicas a el porqué me reconforto en la comida como mi escape, como una forma de droga para levantar mi moral (y seguramente mis niveles de serotonina). En los últimos siete años de mi vida he presenciado el colapso de mi sueños profesionales. Mientras la mayoría de las mujeres tiene como prioridad número uno formar una pareja y tener hijos, incluso en desmedro de lo que puede llegar a ser o es una brillante carrera profesional, yo desde que tengo 12 ó 13 años siempre soñé ser profesional y dedicarme a estudiar y trabajar. Claro, el meollo de la cuestión es que nunca supe bien qué hacer con mi vida: soy de esas personas curiosas por naturaleza, lo que significa que muchas cosas me gustan: me encanta la psicología, me encanta escribir, y aunque soy bastante antisocial no me molestaría trabajar de relaciones públicas para una empresa, e incluso creo que hubiera sido buena médica porque amo leer artículos de medicina y cuando alguien tiene algún síntoma físico o yo misma lo tengo sé más o menos indagar qué malestar puede llegar a padecer (lo que por supuesto no me hace un médico valga la aclaración).
Nunca fui de esas chicas que decía "cuandos sea grande quiero ser secretaria o docente o médica... etc". De chica tenía sueños vago: lo único que sabía que quería ser independiente, ganar mi plata y dedicarme al algo artístico. De chiquita amaba ver dibujitos animados, entonces soñaba con ser una dibujante de storyboards ... claro que... por un lado nunca tuve el talento suficiente (ni insuficiente) para ser dibujante. Durante mi adolescente, se fue perfilando que quería estudiar comunicación social. Un buen día cayó a mis manos un folleto sobre esta carrera y como vi que las materías que se dictaban eran un lindo poupurrí: un poco de sociología, psicología, economía, teorías de la comunicación y dije para mis adentros "Zas, voy a estudiar esto". ¡¡¡Qué flor de hija de puta si hubiera sabido que esa carrera no servía para nada! Luego cuando cumpli 15 años y lo miraba a Lanata con su programa "Dia D", estaba casi enamorada del gordo y decía que quería ser periodista. Si bien siempre fui muy lectora, no sé porqué carajo decía que quería ser periodista porque en realidad nunca me importaron demasiado las noticias ni la actualidad. En fin, para cuando cumpli los 18 comencé comunicación y la finalicé a las 23 años con tesis concluido y todo. Cuando obtuve mi título fue un sabor agridulce, no sabía bien para qué mierda había estudiado comunicación ni siquiera para qué carajo me servía... A la par había empezado a estudiar durante mis años de facultad traductorado de inglés y lo dejé (cosa que me arrepiento muchísimo). En fin, la cuestión que cuando me recibí dije "quiero ser periodista", me vine a trabajar a Buenos Aires y llegué a trabajar para una editorial de revistas y diarios muy conocida de Buenos Aires (sino la más conocida), pero lo más triste de la historia fue que no no entré a trabajar como periodista, que era lo que realmente quería sino como secretaria del dueño de la editorial (el pelafustán en cuestión de Jorge Fontevecchia). Luego de tres años de una amargura existencial terrible, el tipo era como el personaje del diablo se viste a la moda: una persona soberbia, insesible y cuyo único trato que podías recibir era el de casi una mucama (sin desmerecer a mucamas por supuestos). Eras su esclava. Me cansé de la situación y le pedí a Jorge cambiar de puesto, le confensé que quería ser redactora, que quería entrar la redacción. El tipo ni bola me dio, me dijo que los redactores entraban como colaboradores y que tenía que hacer mucho camino y bla bla bla... La cuestión que le importó un pito que fuera su asistente personal y no me ayudó mucho esta situacion y además supongo que debe haber sido un golpe inmenso para su ego que su "secretaria" quisiese irse corriendo de ese puesto de mierda para ser redactora. La cuestión que arreglé con la empresa y me fui a la mierda. Pero durante esos tres años de sufrir como una perra, de ser bouda y tratar de hacer mérito para pasar a la redacción me fueron matando lentamente: la constante angustia de tratar con un tipo irascible, egocéntrico, maniático como Jorge y mi moral por el suelo por no poder ni acceder a un buen sueldo (¡porque el sueldo sí que era patético trabajando con Jorge!) ni pasar a redacción fueron minando mi saludo mental a la par de la física: los kilos fueron subiendo, primero fueron cinco, luego diez, quince hasta llegar a pesar 90 kilos. Empecé trabajando en la editorial con 65 kilo sy me fui con 90 kilos de más. Luego de eso fue todo cuesta para abajo: me fui de la compañía con mucha furia y mi vida personal no era mucho mejor: la persona que era mi pareja me había engañado y se había ido a vivir con otra persona. Todo esto hizo que mi moral se fuera más por el suelo. Luego fui pasando de trabajo en trabajo (incluso cuando comencé este blog estaba trabajando en algún call center de mierda o algo por el estilo...) hasta llegar al trabajo actual: que estoy como administrativa en un lugar que me tratan bien y me pagan bien, pero del cual debo decir que no me gusta mi trabajo porque es relacionado con los número y lo administrativo (imaginen trabajar todos los días con números y hacer lo mismo, ¡Un horror!).
Creo que si tuviese que elegir de qué trabajar, me gustaría trabajar como escritora: ya sea escribir artículos o ficción (cosa que me encanta). También estoy pensando en algún día estudiar psicología, al fin y al cabo presté mi oreja y mi comprensión a gente que no se la merecía, que no estaría mal que me paguen por eso, o tal vez mis conocimientos de lenguas extranjeras me ayuden a ser diplomática... pero como verán la angustia continua y sigo inconforme con mi carrera y ya ciertamente si bien soy joven, no soy una niña.
¿Será que mi gordura no me deja estar bien y no focalizo en lo que realmente quiero hacer? ¿O será que no saber bien que "ser" (que verbo tan fuerte "ser) me hará comer de más y ser gorda? La pregunta ya la tiré... ojalá que algún día halle el final del laberinto.

2 comentarios:

Sandra dijo...

Hola!!!! y que preguntas difíciles son las tuyas, creo que si no estamos bien con nosotros mismos es como si estuviéramos fuera de eje, me pasa como mamá hay momentos que no estoy bien y logro se 100% yo misma.
Me parace que todo esta dentro de uno y... es un proceso reencontrarse con esa parte,
Mis saludos,

PGA dijo...

Mari hasta ahora conozco tu blog y me ENCANTA tenés una forma tan natural y sarcástica de escribir que es bellísimo leerte porque parece que se se está oyendo una pensar, así que espero publiqués tus libros pronto.
Además vieras que conseguí un libro de Marianne Willianson que se llama A Course in Weight Loss es una nueva perspectiva de como bajar de peso o al menos hacer las pases con el cuerpo
Espero que estés bien y seguí escribiendo
un abrazo
PGA