Hace ya nueve días que estoy a dieta y hoy peso 91,900. Es impresionante como cuando uno come poco baja y cuando come como cerdo engorda. Pero más allá de lo que uno coma, lo más interesante es ver como uno va cambiando la forma de relacionarse con la comida. Si bien es pronto decir "he cambiado hábitos", lo interesante es ver la actitud que uno va poniendo día a día. Ayer fui a cenar con un amigo, y pedí un menú light (una milanesa de soja con verduras al vapor y de postre ensala de frutas). No voy a mentir, justo le comentaba a mi amigo cuando estábamos esperando la comida que al ver la tonta sentía unas ganas terrible de comerla, sin embargo cuando vino la comida, y comí lo que tenía que comer no me tenté luego... Hoy le comentaba a una compañera de trabajo que también es gordita que lo bueno de hacer este tipo de dieta (Una VLCD very low diet calory) es que ves lo resultados muy pronto en la balanza. Ayer me dijo mi amigo que me veía más flaca de cara, yo la verdad no me doy cuenta, incluso si bien adelgacé como cinco kilos hasta ahora, no noto mucho diferencia... Pero lo importante es que estoy enganchada con el plan y los primeros días son cruciales, el mantenerse motivado. Cuando uno empieza un regimen, generalmente a los pocos días lo quiere abandonar porque quiere ver los resultados ya. Hay que recordar que nuestro problema, más allá de la gordura, es que básicamente somos personas ansiosas, queremos todo para ahora, y algo que tenemos que aprender a manejar es el tema de la ansiedad. No voy a mentir, quiero ver cambios en mi cuerpo, pero tampoco me voy a desesperar. Lo importante es que ya no me siento como un cerdo luego de comer, o que no puedo ni respirar de lo mucho que comí... Los cambios psicólogicos de hacer una dieta son increíbles. Me siento más activa, con más energía, con ganas de hacer cosas.
Le dediqué mucho tiempo a la comida y a las tentaciones, ahora quiero dedicarselo a mi cuerpo.
Creo que ya es hora.
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